¿Quiénes pueden ser afectados?

No solo la persona directamente lesionada en un accidente de tránsito puede reclamar compensaciones. Las personas cercanas, como cónyuges, hijos, padres, hermanos, y otros familiares, también pueden sufrir daños que merecen ser indemnizados. Inclusive, personas con relaciones afectivas como parejas, amigos cercanos o compañeros pueden verse afectadas psicológica y patrimonialmente.

Tipos de daños reclamables

Las sanciones para cada uno de estos delitos varían dependiendo de si se hayan provocado o no, daños materiales, y según se hayan generado o no lesiones.

• Daño patrimonial: Se refiere a las pérdidas económicas sufridas por quienes dependían de la víctima para su sustento o que tuvieron que asumir gastos relacionados con el accidente. Por ejemplo, gastos médicos o funerarios.
• Daño extrapatrimonial: Este tipo de daño abarca las emociones, angustia y sufrimiento que experimentan quienes tenían una relación cercana con la víctima. Abarca aspectos como el dolor emocional o el impacto psicológico, que también pueden ser objeto de indemnización.

¿Quién puede reclamar una indemnización?

Para reclamar una indemnización por daño por rebote, la persona afectada debe probar su relación con la víctima y el impacto que el accidente ha tenido en su vida. Entre las personas que pueden reclamar se incluyen:

• Cónyuge o pareja.
• Hijos, nietos o padres.
• Hermanos, tíos, primos, e incluso amigos cercanos, compadres o colegas.

Cómo proceder con una reclamación

La complejidad en este tipo de demandas radica en determinar quién está legitimado para reclamar y cuantificar el daño sufrido. Es recomendable buscar el asesoramiento de un abogado especializado en accidentes de tránsito para evaluar la viabilidad del reclamo y los montos que podrían ser demandados. Cada caso es único y la asesoría legal garantizará que se valoren adecuadamente los perjuicios patrimoniales y extrapatrimoniales sufridos. Puedes agendar directamente una aesoría con nuestro equipo en el siguiente enlace.